lunes, 29 de septiembre de 2008

¿Unidad sin debate?

En medio de la mayor crisis en materia de seguridad, y cuando la economía mundial se derrumba, la administración Calderón levanta la bandera de la unidad, pero sin ideas ni propuestas.

Las proclamas lanzadas desde el gobierno para que todos —propios y extraños, críticos y panegiristas— nos envolvamos en la bandera que enarbola el Presidente de la República por el solo hecho de serlo, ha empezado a exhibir agujeros que no podrán ser colmados con discursos y posturas sentimentales.

El gobierno dice tener propuestas contra la inseguridad, como crear una especie de policía nacional, pero no establece una mesa de discusiones abiertas a la sociedad, pese a tratarse de un asunto de rango aún más urgente que el tema petrolero. De esta manera, se cierran espacios, se inhibe la atmósfera de colaboración y se despoja a la sociedad de su derecho a tomar la palabra.

El resultado es lo que hemos empezado a ver estos días.

Un grupo de dirigentes partidistas acudió en días pasados a Los Pinos. Destacaba Beatriz Paredes, del PRI, quien se descubrió en un salón con sólo voces gubernamentales, como el líder panista Germán Martínez, y representantes de partidos casi marginales.

En las horas siguientes, la casa presidencial se dio a la tarea de organizar una cita del presidente Calderón con los coordinadores parlamentarios para el lunes pasado. El PRD —que sigue siendo incapaz de pactar acuerdos al interior, mucho más hacia fuera— anunció nuevamente su ausencia, pero esta vez tampoco el PRI aceptó. El encuentro fue cancelado.

Vino luego la petición de audiencia por parte del líder senatorial priísta Manlio Fabio Beltrones y otros miembros claves de su bancada. “¿Tema?”, les preguntaron. “Deseamos ayudar, pero queremos que el Presidente nos diga cuál es el rumbo”, respondieron. La reunión se acordó para el viernes, pero todavía en la víspera les propusieron mutar el formato hacia una cordial comida con el mandatario. Junta de trabajo, insistieron los priístas.

Hablaron, pero hasta donde fue posible saber, no avanzaron. Calderón insistió sobre una propuesta en materia policial que ya habían deslizado antes a los gobernadores, sin debate público. Los mandatarios del Institucional se mostraron reacios, y las posturas se distanciaron, como quedó demostrado en la junta de Conago en Sonora, en la que se canceló la presencia del propio Calderón.

Hoy habrá una reunión sólo de líderes priístas, incluidos los gobernadores. Se espera que ahí queden desatados los últimos nudos para la reforma petrolera, que PAN y PRI —y quizá un bloque del PRD— sacarán adelante en la primera quincena de octubre, aunque no será lo que el gobierno esperaba.

En este encuentro habrá también señales sobre si el PRI sigue acercando sus posturas a las del gobierno, si vira hacia un rompimiento, o si hace las dos cosas; esto es, si toma distancia sin hacerlo público, en espera de lo que decidan las urnas en 2009.

Pero no se equivoca Calderón cuando llama a estar a la altura del momento: los mexicanos darán fe de si la mediocridad de sus élites políticas permite algún avance real en favor de la población, o si no son capaces siquiera de presentar ante la nación una sola idea, un solo afán, acaso una propuesta.

Apuntes

  • NO ES SÓLO MORELOS donde enfrenta resistencias la Alianza por la Educación que impulsan el gobierno y Elba Esther Gordillo. Las opciones son una regresión disimulada para evitar al régimen un nuevo frente de problemas, o sostener la voluntad de un cambio real.
  • LOS CELULARES y la iniciativa del Senado para transparentar la información de los usuarios, como un paso clave en materia de seguridad pública, desató una nueva guerra de cabildeo que unió a compañías tradicionalmente rivales, como Telcel y Telefónica, cuyos principales directivos hacen gestiones para evitar la regulación, por considerar que ello desalentará la compra de estos aparatos. Este martes se votará la ley respectiva en la Cámara Alta.
  • ESTE LUNES, cuando el periodista Miguel Ángel Granados Chapa reciba del Congreso de Hidalgo la presea Pedro María Anaya, podría anunciarse que el Senado le impondrá igualmente la medalla Belisario Domínguez.

Ir a la publicación original

No hay comentarios:

Publicar un comentario