lunes, 29 de noviembre de 2010

Esos son los indispensables

La muerte de don Pepe Álvarez Icaza y de Rafael Cordera Campos recordó en aquellos que los admiraron por décadas, una trayectoria que ve en la tarea una batalla.

En un país extraviado en su propio laberinto, no debe extrañar que la muerte de José Álvarez Icaza no haya despertado el reconocimiento debido a un artífice central de la defensa de los derechos humanos en México durante el último medio siglo. O que el doloroso fallecimiento de Rafael Cordera Campos no extendiera pesar más hondo por la ausencia de un largo batallador en bien de la universidad pública y de las causas de los jóvenes.

Alvarez Icaza y su esposa Luz María Longoria fueron una sola y la misma cosa en un proceso que comenzó de la mano de la Iglesia católica, al grado que encabezaron el Movimiento Familiar Cristiano, y en 1964 fundaron el Centro Nacional de Comunicación Social (Cencos), para difundir las tareas del Episcopado Mexicano, con la nueva inspiración que otorgaba el Concilio Vaticano en favor de un mayor compromiso social en la jerarquía eclesiástica.

Don Pepe y Luzma, como fueron conocidos por décadas, emprenderían pronto su propio camino cuando descubrieron que su Iglesia miraba hacia otro lado ante los excesos de Gustavo Díaz Ordaz y Luis Echeverría, lo que tácitamente constituyó una complicidad por la que, tarde que temprano, la propia Iglesia mexicana deberá ofrecer disculpas.

Los Álvarez Icaza-Longoria emprendieron con Cencos una ruta ardua. Lo hicieron llevando a cuestas no sólo a 14 hijos –todos los que Dios mandó, supongo-, sino una nueva mirada, que en los años 70 cultivó un debate hasta entonces imposible: el acercamiento entre cristianos y las izquierdas, la comunista incluida.

Muchos en las izquierdas creyeron escuchar el llamado de las armas que enlutó a miles de hogares en México de los 70, especialmente. Pero para don Pepe y Luzma la política fue una faceta de los derechos humanos que querían defender, aunque no coincidieran en los métodos. Y daban su propia batalla con el más alto valor cristiano, la humildad. Con sus artículos en “El Universal”, sus conferencias de prensa y su sonrisa imbatible.

Cencos se volvió techo y tribuna para múltiples expresiones de solidaridad y humanismo. La casona de la calle de Medellín en la ciudad de México, se constituyó por años en el único sitio por donde el país se podía asomar a las atrocidades de aquel régimen que constituyó una dictadura casi perfecta. La procesión de los humildes que dominaba Cencos, sabíamos los reporteros de aquellos años 70 y 80, seguía en el domicilio familiar de los Álvarez Icaza-Longoria, y en una red de casas-santuario que ellos coordinaban, donde se resguardaba a aquellos perseguidos por policías políticas de otras naciones y por cuya vida se temía.

Cencos fue allanado en varias ocasiones, una de ellas, muy grave, a finales de los años 70, cuando agentes de la Dirección Federal de Seguridad seguramente husmearon en busca de pruebas que documentaran que don Pepe y Luzma eran una amenaza para México.

Lo que hicieron fue saquear el sitio, acaso con el ánimo de arrancar de raíz la tarea que ahí germinaba. Una demostración más de que vista con perspectiva histórica, la brutalidad siempre es ociosa.

En esas mismas horas en que sus amigos despedían a don Pepe en su Cencos entrañable, un cáncer voraz derrotó a Rafael Cordera Campos, integrante de un linaje de batalladores. Economista como su hermano Rolando, su labor se concentró en la consolidación de la universidad pública, dentro y fuera de las fronteras mexicanas, con énfasis en América Latina, por lo que encabezó la UDAL, una agrupación regional de estas casas de estudio. Su otra pasión fueron los jóvenes, sus desafíos y desalientos.

Quiso la causalidad de que la propia UDAL que tenía previsto reelegirlo como su secretario general, estuviera sesionando el día de su muerte en Perú, en presencia del rector de la UNAM, el doctor José Narro, quien anunció que como homenaje a Cordera instituirá una cátedra en su nombre orientada al estudio de la juventud latinoamericana.

Horas antes de morir, Rafael Cordera dispuso como su deseo final que aquellos que lo acompañaran al cementerio lo despidieran entonando el ¡Goya¡ universitario, al que desde aquí, con enorme respeto, nos sumamos.

lunes, 22 de noviembre de 2010

Colima: Mezcla tóxica

Un grupo monolítico asentado en el poder público, la universidad y los medios locales ha coqueteado por años con el crimen organizado, con un pacto que ayer se quebró.

A la memoria de Daniel Lund,
hombre de bien.

Como ocurre con Tamaulipas, donde un inminente ganador candidato a gobernador priísta fue asesinado sin que hasta la fecha se sepa de una indagación seria sobre quiénes o por qué lo mataron. Como sucede en Michoacán, donde una veintena de funcionarios municipales de los principales partidos fueron encarcelados por sus nexos con el narcotráfico y luego liberados por una torpeza de la PGR, y un integrante de esa mafia, sirviente del capo “La Tuta”, despacha hoy como diputado federal.

Igual, casi en papel calca, ayer en Colima un ex gobernador fue ejecutado frente a su esposa. El orden de las cosas establecido por los cárteles resultó roto, bajo una lógica que solo ellos comprenden.

Lo que viene es predecible: la autoridad federal mirará hacia otro lado mientras la correlación de fuerzas locales pacta un nuevo statu quo. El tiempo demostrará que esto no resuelve ningún problema, que es una abdicación, una cobardía del Estado. Que ello solamente aplaza el momento en que los políticos de todas las siglas acuerden una depuración de sus cuadros, como ocurrió en Colombia, donde en el término de una década, la tercera parte de su clase política –gobernadores, alcaldes, legisladores- se fue a la calle, a la cárcel o a la tumba.

Lo que ocurre en Colima es una historia ante la que hoy algunos se llamarán a

Como todo en la trama del narcotráfico, las cosas se complicaron en Colima hace tres lustros, cuando se agudizó la llegada por Manzanillo de drogas y compuestos químicos para crear una nueva generación de estupefacientes, basados en las metanfetaminas. El auge que ello trajo se expresó en ranchos, en casas, en dinero fluyendo y en personajes extraños que eran adoptados con efusividad por los políticos e incluso por las buenas familias de la entidad.

El gobierno de Fernando Moreno Peña (1997-2003) administró la putrefacción, ya con la lógica de una mafia: Recurrió al fraude para burlar a las urnas, se abrió en 2004 a la llegada de Gustavo Vázquez Montes, gobernador por un año antes de morir en un misterioso avionazo.

Tras otras elecciones llegó Silverio Cavazos, cuya familia acumulaba imputaciones de ligas con el narco, y quien pavimentó el camino para el actual mandatario, Mario Anguiano Moreno, con parientes procesados por delitos contra la salud, como su hermano Humberto, o su primo Rafael. Este último cayó en Los Ángeles durante una redada contra traficantes de cocaína y metanfetaminas. Cuando los líderes nacionales del PRI expresaron eventualmente a Cavazos que su candidato Anguiano poseía tales antecedentes, Cavazos dijo que solo con él ganarían los comicios. Eso bastó para acallar la conciencia de los dirigentes, que regresaron tranquilos a la ciudad de México.

En solo 13 años, Colima ha tenido seis gobernadores, entre electos e interinos. De ese tamaño es la descomposición.

La mañana de ayer, cuando fue ejecutado, Cavazos Ceballos daba por el estado pláticas sobre valores familiares y tradiciones. Pero se tomaba el tiempo necesario para protagonizar una pugna del brazo de Anguiano Moreno para desplazar del poder real al grupo de Moreno Peña y un grupo de personajes afines, entre ellos algunos empresarios de medios.

Sería perfectamente viable que la administración Calderón emprendiera una investigación que desnudara el orden de cosas entre el poder político y el crimen organizado en Colima. Pero quizá no deba. O no quiera. O no pueda.

Apuntes

MARCELO EBRARD tuvo un buen fin de semana, por la reunión con millar y medio de alcaldes y funcionarios municipales, más los festejos encabezados por el Centenario de la Revolución. Ello trajo impacto nacional e internacional y exhibió músculo ante el gobierno de Felipe Calderón. Pero ahí siguen los problemas mayores de Ebrard, entre ellos el amago de Andrés Manuel López Obrador de crear una fractura en la izquierda, hundir una posible alianza en el estado de México, o la debilidad de las cartas del propio Marcelo para colocar a uno de los suyos como sucesor en el gobierno del Distrito Federal. Tanto ganar afuera para perderlo todo adentro.

lunes, 15 de noviembre de 2010

PAN: El viraje de Calderón

Es una fortuna para Acción Nacional que sólo resten algunas semanas antes de la elección de su nuevo presidente. De prolongarse, la presión interna despedazaría a ese partido.

Para Ricardo Alemán.
Porque en casa lo extrañaremos.

Cuando en los primeros días de diciembre se decida por fin quién será el nuevo dirigente de Acción Nacional, quedará pendiente de contar una de las grandes historias políticas de este año: cómo los cambios de señal desde Los Pinos crearon una experiencia desquiciada en la vida interna del partido en el gobierno.

Nadie sensato puede asegurar ya quién entre Gustavo Madero y Roberto Gil Zuarth cuenta con el aval del presidente Felipe Calderón y, por su conducto, de un porcentaje crucial entre los integrantes del Consejo Nacional que habrán de elegir nuevo presidente y con ello, acaso se decantarán no sólo por un derrotero especifico para su organización sino –sólo acaso- por uno de los dos más fuertes aspirantes del panismo a la candidatura presidencial, Ernesto Cordero y Alonso Lujambio.

Tras una señal abierta, obvia, del calderonismo a favor de la institucionalidad y la seriedad del apacible senador Madero, varios de los principales operadores de la casa presidencial aparecieron en el cuartel general de Gil Zuarth, una estrella emergente del blanquiazul, diputado federal que eventualmente había sido convocado a la Secretaría de Gobernación por Fernando Gómez Mont para aprovechar la capacidad de diálogo y el pragmatismo de ese hombre que había alcanzado respeto e incluso popularidad entre priistas y perredistas en San Lázaro, de la mano de su jefa e impulsora, Josefina Vázquez Mota.

Pero el affaire de las alianzas y la desaparición de su aliado Diego Fernández de Cevallos desbarrancaron a Gómez Mont, frenando la consolidación de Gil, quien pese ello apostó fuerte por quedarse con el cargo de titular. Sus 33 años de edad, su audacia y su ambición, quizá sus principales atributos, jugaron esta vez en contra y llegó al cargo Francisco Blake, con otra visión del mundo, de la política y también, con otro equipo.

Gil se fue, pero una mañana apareció al lado de Patricia Flores, de Germán Martínez, de Jordi Herrera, de Jorge Manzanera y de otros integrantes del equipo en la sombra de Calderón.

El Presidente ya había lanzado la señal a favor de Madero. Se entendió que lo de Gil Zuarth era un berrinche. Las semanas recientes han demostrado que el índice presidencial podría estar señalando hacia otra cabeza, lo que ya ha traído una guerra intestina en el PAN entre los mismos personajes que antes se enfrentaron en Los Pinos.

Es casi imposible que esa justa se aclare en la primera vuelta de las elecciones del Consejo panista. La segunda y definitiva vuelta será, a querer o no, un aparador de la operación presidencial. Y ya con ganador, habremos de empezar a rescatarla la historia completa.

Apuntes

MICHOACÁN se aproxima a elecciones de gobernador y encuentra a los tres principales partidos ayunos de candidatos idóneos. A ello se añade una montaña de dudas sobre las eventuales ligas de algunos aspirantes con el crimen organizado. El PRI luce como el más desvencijado tras dos sexenios fuera del poder. El PRD ha sido en 12 años incapaz de crear nuevos cuadros, y quizá tendrá que recurrir a un antiguo colaborador del ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas en pos de coherencia y abanderado. El PAN está en una encrucijada, pues deberá decidir entre personajes probados, como alguno de sus senadores, o dar paso a la aventura de la “primera hermana” Luisa María Calderón, cuyo campaña abierta parece estar generando anticuerpos tanto en la dirigencia local como en Los Pinos. Por lo pronto, nadie ha podido responder si la hermana del Presidente, por serlo, haría campaña acompañada de un regimiento militar. Otra posibilidad es que Cocoa, como le llaman sus cercanos, en realidad sea un catalizador para construir una alianza opositora que impida un nuevo periodo bajo control del sol azteca.

lunes, 8 de noviembre de 2010

Los consejos de Colombia

Como presidente electo, Felipe Calderón viajó a la nación sudamericana con una preocupación: El narcotráfico tenía un poderosos aliado en México: el silencio.

En el otoño de 2006, antes de asumir el poder, Felipe Calderón tuvo un encuentro con Juan Manuel Santos, entonces ministro de Defensa colombiano, en pos de consejo. Lo que escuchó confirmó su determinación para decretar como primer acto de gobierno la llamada guerra contra las mafias del narcotráfico.

El mismo Santos, hoy convertido en presidente de la nación sudamericana, trajo ayer hasta México un nuevo paquete de ideas precisas. Pero recordó cuando en aquella oportunidad, Calderón explicó su principal inquietud respecto de las bandas criminales con un argumento inquietante: Ahí donde el narcotráfico ha penetrado se imponen el silencio, el disimulo, la complicidad.

Santos explicó que Colombia tuvo su propio periodo de silencio, que se extendió por décadas, hasta llevar a su país al extremo de ser “casi un Estado fallido”, donde las mafias “doblegaron” a la democracia hasta llevar a la Constitución la prohibición de las extradiciones. Y luego refirió determinaciones esenciales de la solución colombiana, como llevar a la cárcel a centenares (cerca de 400) de funcionarios públicos de diversos niveles, incluidos al menos 30 legisladores, como producto de un acuerdo entre partidos para limpiar a la vida pública de la narcopolìtica.

El mandatario colombiano, que acudió a Mérida a la asamblea de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), pronunció un amplio discurso que centró en el caso mexicano. Y adelantó una frase contundente: En Colombia no hay condiciones para el resurgimiento de grandes capos. Los que hubo están en la cárcel o en la tumba.

En alusión indirecta a las voces que en México sugieren la necesidad de pactar con los cárteles, Santos advirtió que “contemporizar es sucumbir”. La violencia en su país, dijo, los despojó de sus mejores políticos, sus mejores jueces, policías y periodistas, pero Colombia decidió mantener su determinación, sin minar las bases de una convivencia democrática.

Santos, quien durante años fue directivo de “El Tiempo”, el principal diario colombiano, planteó también algunas lecciones para la prensa, entre ellas, comprender que las mafias buscan utilizar a los medios para minar la confianza social sobre la tarea que está desarrollando el gobierno. Que en ese sentido actúan las coberturas periodísticas que se reducen a presentar hechos violentos, incluso a exagerarlos.

La prensa colombiana entendió que debía presentar un frente común frente a la violencia, sin sometimiento alguno frente al gobierno pero distinguiendo su papel en una tarea de la que depende el futuro del país.

Santos no lo dijo, pero a la luz de la experiencia colombiana habría que concluir que a México le falta todavía un largo tramo por recorrer. Y cada escala representa sufrimiento.

Apuntes: Otra vez el IFE

UNA SEMANA se cumple con un IFE incompleto, ante la apatía y la incapacidad de los partidos representados en la Cámara de Diputados, que no han logrado definir el nombre de los tres consejeros que sustituirán a los que cesaron en sus funciones el último día de octubre. El organismo, que ha dado tumbos desde los polémicos comicios presidenciales del 2006, conserva una mayoría de seis consejeros sobre los nueve que debe albergar, lo que permite sesionar a su Consejo General. Tal es el argumento de aquellos que no muestran prisa. Lo que ocultan es que comisiones clave están acéfalas, como la de Radio y Televisión, que formaban justo los tres ex integrantes. El panorama se complementa con la opacidad en que cayó el proceso de designación, lo que anticipa no necesariamente el surgimiento de personajes conocedores de las materias electorales y dotados de crédito público, sino elementos subordinados a los partidos. Así parecemos avanzar hacia la nueva pesadilla que puede surgir de las urnas en el 2012.

martes, 2 de noviembre de 2010

PAN: El desafío a Calderón

¿Quién aprovechó la rabieta de Roberto Gil Zuarth? ¿Sólo los ambiciosos Jorge Manzanares y Patricia Flores, o están ahí también algunos poderosos de Monterrey?



Aquellos que hasta hace unas semanas mostraban reservas ante el arribo de Gustavo Madero a la presidencia de Acción Nacional, por su cercana relación con el presidente Felipe Calderón, han descubierto que la otra alternativa es un grupo de mercaderes que busca tomar por asalto al partido en el poder.

El diputado Roberto Gil Zuarth, considerado una estrella panista en ascenso, al que se le atribuye una rabieta por no ser designado secretario de Gobernación, lo que lo habría hecho lanzarse en pos de la dirigencia panista, decidió ponerse en manos de una facción formada a la sombra de Calderón, pero de la cual el mandatario ha tomado clara distancia en reuniones privadas, según comentaron a este espacio testigos directos.

Tal facción incluye al estratega electoral Jorge Manzanera, a “La Jefa” Patricia Flores y, según las evidencias disponibles, a diversos empresarios de Nuevo León cuyos intereses representa el actual alcalde de Monterrey, Fernando Larrazábal.

Llama la atención el oscuro ingeniero Manzanera Quintana. Los registros disponibles lo ubican a inicios de los 90 como número dos del PAN en Chihuahua, al lado de Manuel Espino. A mediados de esa década ya era secretario Electoral en el PAN nacional cuando Calderón fue presidente, y operador central de campañas del blanquiazul desde 1997, sea bajo encargo de su partido, sea haciendo negocios con su empresa “Desarrollo y Operación de Campañas”, S.A. (DOCSA), que lo mismo organiza un mitin, compra voluntades, controla casillas o litiga ante autoridades electorales. Por años, en cada plaza donde el PAN ganaba, Manzanera y DOCSA obtenían contratos millonarios por asesoría.

Su estrella se derrumbó en 2009, cuando era secretario general adjunto con Germán Martínez y había colocado en la secretaría Electoral a su mano derecha, Alejandro Villalobos. En los comicios de ese año Acción Nacional fue humillado: retrocedió en más de cuatro millones de votos, además de perder gubernaturas y otras plazas clave.

Este tema recobró vigencia apenas el sábado último, durante una reunión del Consejo Nacional panista, el mismo órgano que en diciembre designará a quien relevará a César Nava en la presidencia.

Como el Consejo tenía en agenda revisar las deudas surgidas del proceso 2009, Manzanera, Germán Martínez y otros buscaron impedir el quórum necesario para que el organismo sesionara. No pudieron, lo que quizá anticipe lo que ocurrirá en la elección de presidente.

Fue necesario esperar dos horas para que el Consejo iniciara discusiones, que revelaron un panorama incómodo: Martínez y Manzanera gastaron 600 millones de pesos en el proceso electoral, 400 de ellos obtenidos mediante un préstamo bancario que vence en 2012, en plena campaña presidencial. Otro dato: durante su gestión como presidente, Martínez se asignó sueldo de secretario de Estado.

Así opera el equipo Manzanera-Flores-Larrazábal, que se ha echado a cuestas la campaña de Gil Zuarth, impugnada por otros dos contendientes, la senadora Judith Díaz y por Francisco Ramírez Acuña, pues el referido diputado federal no cumple principios establecidos en los Estatutos de su partido.

Este equipo ya operó en septiembre pasado cuando logró imponer como dirigente juvenil del blanquiazul al neoleonés Jonathan García. En esta ocasión presumiblemente no tienen los votos necesarios para ganar la presidencia nacional panista por sobre Gustavo Madero. Pero han decidido jugar a las vencidas con el bloque mayoritario del PAN y con el propio presidente Calderón.



Apuntes: CNDH imprudente


LA TRANSPARENCIA no vive sus mejores momentos. Entidades federales como la PGR, Función Pública y Hacienda se resisten a la apertura y presionan en busca de una regresión. En este contexto, en marzo pasado el IFAI, órgano garante de la transparencia y la protección de datos personales, ordenó al Sistema de Administración Tributaria (SAT) revelar la lista de créditos fiscales cancelados. Lo que ha seguido forma un catálogo de maniobras administrativas y judiciales por parte de la autoridad para no cumplir con su obligación. A ese baile se sumó la CNDH, que encabeza Raúl Plascencia, la cual auspició una queja de ciudadanos beneficiados por cancelaciones del SAT. La CNDH pidió al SAT no liberar la información respectiva, a lo que el SAT se allanó, muy contento. Con ello la CNDH parece prestarse a una burla a la ley y a resoluciones judiciales que limitan sus atribuciones en este campo. El IFAI protestó. El asunto acabará en la Corte, que ha ido eludiendo tomar postura en estos temas.

lunes, 25 de octubre de 2010

Drogas: enigma en California

El 2 de noviembre el estado norteamericano que más consume -y produce- mariguana votará una ley para legalizarla. En ese caso, ¿qué impacto tendrá en México?

Pese a la obviedad de que la demanda interna y externa es lo que alimenta el negocio del tráfico de drogas, México ha dedicado tiempo, dinero y 30 mil vidas, sólo durante la presente administración, a combatir el lado de la oferta. En ese infierno estamos.

Pero la miopía no es contagiosa.

El mercado norteamericano gasta anualmente sólo por lo que toca a la mariguana, 30 mil millones de dólares (mdd), algo así como 375 mil millones de pesos (mdp). Al menos 14% de esa cantidad se concentra en el mercado de mercado de California, donde la próxima semana será votada la llamada Propuesta 19, que plantea legalizar el consumo, el cultivo y la venta de cannabis.

Cálculos oficiales sitúan en 13,800 mdd (172,500 mdp) los ingresos anuales de los cárteles mexicanos por la introducción de narcóticos a la Unión Americana. Durante años se estimó que 60% de esa cantidad provenía de la mariguana, pero apenas en septiembre pasado reportes del gobierno norteamericano tomaron distancia de esa proyección, lo que fue confirmado en este octubre por un informe de la corporación Rand, el cual ajusta la cifra a apenas 15%. Los cárteles mexicanos obtendrían 2,070 mdd o 25,875 mdp por introducir mariguana a territorio estadounidense.

Se prevé que la legalización de la mariguana en California desplomaría el precio de la dosis a una sexta parte. Su comercio formal atraería al fisco del estado ingresos por 1,200 mdd anuales. La mitad de los 37 millones de californianos aceptan haber probado al menos alguna vez la mariguana. Ese estado produce hoy en forma clandestina gran parte de la mariguana que su mercado demanda, pero con la legalización podría exportar a otras regiones del país.

El citado reporte de Rand estima que esta legalización tendría un impacto de hasta 4% (552 mdd o 6,900 mdp) en los ingresos de los cárteles mexicanos, lo cual aumentaría si parte de la producción de California se destina a otros estados, atrayendo un desplome general en los precios.

Este efecto, asegura el informe de Rand, puede agudizar la violencia del lado de la frontera mexicana pues la disputa por un mercado más pequeño se agudizaría. Pero en el mediano plazo, estima, esta violencia tendería a disminuir.

Resulta una ironía que mientras en México la batalla contra las drogas parece hundirnos en un pozo cada vez más profundo y oscuro, donde las ideas se apagan y domina el terror, en Estados Unidos -fuente de la demanda, las armas y destino principal del dinero que generan los narcóticos- avancen con parsimonia hacia la legalización, lo que además de otras soluciones, traerá a la autoridad un buen negocio.

Apuntes

EL PAN vivirá en tensión durante las cinco semanas que restan antes de la elección de su nuevo presidente. Gustavo Madero puede dar por descontado que en diciembre tendrá los votos necesarios para relevar a César Nava, pues la oposición interna se ha dividido por influencia de caprichos y revanchas. Con todo, Madero tendrá como primera tarea cicatrizar heridas y construir consensos antes de mirar hacia el 2012. VECINOS del DF vivieron ayer una jornada de frustración ante los fallidos comicios de representantes de colonias y pueblos. Ni los esfuerzos del IEDF y del Tribunal Electoral, que organizaron el proceso sin recursos ni tiempo, a la luz de una ley aprobada sobre las rodillas, fueron suficientes para convencer a los ciudadanos de participar.

EN CHIHUAHUA el gobierno de César Duarte repite pifias de su antecesor. Los resultados están a la vista: una nueva masacre en Ciudad Juárez y una apenas disimulada confrontación con el gobierno federal. En este último caso, autoridades de la Procuraduría estatal advirtieron a la Secretaría de Gobernación que no desean acatar el fallo de la Corte Interamericana de Derechos Humanos en el llamado caso “Campo Algodonero” en el que -noviembre de 2001, también en Ciudad Juárez- fueron asesinadas ocho mujeres, dos de ellas menores, un crimen que atrajo la condena de la Corte por la impunidad vigente.

PERIODISTAS. Está listo el convenio que coordinará a diversas dependencias federales y la CNDH en un programa de protección a comunicadores. El presidente Calderón ofreció lanzarlo en octubre. El documento ya está en el escritorio del secretario de Gobernación, Francisco Blake.

lunes, 18 de octubre de 2010

Salinas, el demócrata

El último presidente del autoritarismo se coló en el 20 aniversario del IFE para autofestejarse con su acto de magia preferido: contarnos mentiras.

Hombre controvertido, acaudalado, obsesivo del poder, Carlos Salinas de Gortari no ha permitido que la historia ponga su legado en perspectiva porque se mantiene en las trincheras de la política activa, las maniobras, las facciones, los negocios. En un partido ayuno de ideólogos, ha preferido la vulgaridad de la grilla.

El pasado martes apareció en el foro celebratorio por el 20 aniversario del Instituto Federal Electoral, donde habló de democracia, de alternancia, de contiendas electorales equitativas y desde luego, de la batalla por el 2012, donde se ha convertido en el promotor incómodo lo mismo de Enrique Peña Nieto que de candidatos a gobernador o de líderes del PRI. Es un fardo para el resto de la clase política priísta, que ya no sabe cómo librarse de él.

En las pasadas elecciones para gobernador de Nuevo León, que adoptó como su tierra natal, Salinas asumió el control del proceso interno del Institucional: Cabildeó con los aspirantes, transó con medios locales, llevó sobre los hombros a Rodrigo Medina de principio a fin, asignó compromisos de aportaciones a gobernadores… Desde la ciudad de México, algunos dirigentes urdieron una travesura: filtrar el nombre del propio Salinas como precandidato a la gubernatura, para arrojar luz sobre la hiperactividad del ex presidente y mandarle el mensaje de que si quería ser el factótum, al menos diera la cara.

En el citado foro del IFE, que tuvo como telón de fondo la nueva crisis de ese organismo por la próxima salida de tres de sus consejeros, Salinas se afanó nuevamente en dibujar su sexenio (1988-1994) con los tonos que nadie vio nunca. “Podríamos decir que además de Perestroika (modernización) hubo también Glasnost (transparencia, democracia)”, declaró, sin inmutarse, durante su ponencia.

De ser cierto que el salinismo nos trajo mayor transparencia del poder, hoy sabríamos cómo se armó el fraude electoral contra Cuauhtémoc Cárdenas; a cambio de qué se pactó el reconocimiento del PAN a Salinas; quiénes ordenaron las muertes de Posadas Ocampo, Colosio y Ruiz Massieu; quién permitió el enriquecimiento de Raúl Salinas, y cómo se operó el triunfo abrumador, en 1994, de Ernesto Zedillo. También, de donde proviene la riqueza del propio ex mandatario, a la que aludió hace poco su amigo Fidel Castro, al revelar que se le impidió hacer inversiones en Cuba.

Zedillo, último presidente emanado del PRI, declaró en su tiempo espontáneamente, que arribó a Los Pinos en forma “limpia, pero no equitativa”. Y el propio Salinas relató en uno de esos libros que condensan sus exabruptos, que tras el debate de la campaña de 94, en el que Zedillo se vio débil y extraviado frente a Diego Fernández de Cevallos, la administración Salinas debió maniobrar para “salir al rescate” del candidato oficial. Ello incluyó, se sabe ya, ordenar que los medios de comunicación, especialmente la televisión, cerraran los espacios al aspirante del PAN.

Ese es el “glasnost” que Salinas de Gortari nos heredó. Ello incluyó, cómo olvidarlo, el arribo de candidatos opositores a gobiernos de los estados, lo cual no se derivó necesariamente de las urnas, no al menos en los casos de Guanajuato o San Luis Potosí, donde un sistema electoral podrido hacía imposible saber quién ganaba realmente los comicios.

Aun el IFE de 1990, que José Luis Lamadrid diseñó para Salinas, no resistió la prueba de la legitimidad luego de que el entonces secretario de Gobernación, Jorge Carpizo, lo armó con la engañifa de la ciudadanización desde arriba. Los propios consejeros así designados asumieron la necesidad de una gestión recortada para dar paso a un nuevo diseño del IFE. No sólo sin el gobierno, sino sin Salinas.

Apuntes

LA ALTERNANCIA en la gubernatura de algunos estados no será tersa. Negociones entre el PRI y Los Pinos perfilaron un pacto, pero las maniobras de gobernadores salientes para anticipar la aprobación de cuentas públicas ha hecho crecer la irritación. Caerán cabezas y las miradas se concentran en Puebla.

EN AGUASCALIENTES, donde el tribunal electoral ordenó un recuento, el gobernador saliente, el filo-priísta Luis Reynoso, no halla la fórmula de limpiar los cómputos distritales que en un primer momento se saltaron olímpicamente. Salvo una sorpresa, el escenario de la anulación es real.

lunes, 11 de octubre de 2010

Violencia y diplomacia

El gobierno de Felipe Calderón presencia todos los días cómo se adelgazan sus alianzas internaciones para combatir al hampa. Lo que ocurre con EU es ya una tragedia.

Quienes asisten a las reuniones del Gabinete de Seguridad en Los Pinos saben que no hay tema que pueda irritar más al presidente Felipe Calderón que la falta de respuesta de Estados Unidos a las exigencias de corresponsabilidad por tratarse del imán que atrae el flujo de las drogas, y por ser el principal proveedor de armas para las mafias mexicanas.

Durante meses, Washington ha ofrecido a México vehículos de Rayos X y Gamma para detectar en nuestra frontera transportes sospechosos de llevar drogas. Pese a que tal donación está en la llamada Iniciativa Mérida, pactada hace años, ello no ha ocurrido. Ante las dificultades expuestas por autoridades norteamericanas, la contraparte mexicana ha propuesto que tales vehículos sean emplazados en territorio estadounidense para frenar el trasiego ilegal de armas, que nutren hasta en 90% los arsenales de los capos. La respuesta ha sido un frío silencio.

En contraste, fuentes de la nación vecina han tomado cuidado en distribuir discretamente reportes en los que se detalla el tipo y el valor de la colaboración, no sólo a las fuerzas armadas, sino a dependencias tan diversas como la Secretaría de Hacienda o el Cisen, con montos crecientes desde el 2000.

Algo se ha roto en la comunicación entre el gobierno mexicano y Estados Unidos en materia de combate a las mafias. No es un proceso reciente, y no se trata sólo de dinero. Diplomáticos de ambas naciones, que hasta ahora han logrado que el problema quede compartimentado para no contaminar al resto de la relación, muestran cada vez mayores dudas de que no esté en puerta una crisis internacional de proporciones no vistas.

En esa línea parece ubicarse una pequeña cascada de declaraciones y documentos que tuvieron su punto de arranque la primera semana de septiembre pasado con la advertencia de la secretaria de Estado Hillary Clinton –luego matizada personalmente por el presidente Obama-, referente a nuevas modalidades del crimen en México, con efectos similares a lo ocurrido a partir de los años 80 en Colombia.

Documentos que circulan profusamente bajo la firma de “think tanks” y otras entidades norteamericanas hablan de una evolución de las mafias mexicanas hacia grupos paramilitares que buscan controlar territorios específicos, donde no exista más autoridad que ellos, por lo que exhiben una vocación “insurgente” similar a las guerrillas que en Colombia tuvieron reivindicaciones sociales y alcanzaron gran poder de fuego tras su alianza con los cárteles de las drogas.

Otra faceta de la crisis de nuestra diplomacia es la tensión con naciones de Centro y Sudamérica en las que existe creciente presencia de las mafias mexicanas. Hay evidencias de que el flujo de las drogas dejó de usar en los últimos años las aguas del Caribe para desarrollar rutas terrestres a través de países como Honduras y Guatemala, convertidas en “bodegas” de los traficantes.

En los pasillos de la diplomacia norteamericana se estima que el punto de quiebre se dará cuando alguna banda que opere en México extienda sus acciones a territorio norteamericano con carros-bomba u otras modalidades a las que hemos acabado por acostumbrarnos.

Ese tipo de actos recibe en todo el mundo el nombre de terrorismo. Aquí los disfrazamos con eufemismos, pero a los vecinos del norte les gustan menos los sinónimos y el disimulo. Esa será la frontera de la pesadilla.

Apuntes

EN CHIHUAHUA tendrá mañana el presidente Calderón una especie de cumbre de seguridad con los gobernadores producto de los comicios de este año. Ya se anticipó el discurso del hombre de Los Pinos sobre colaboración y corresponsabilidad. A ver si alguno de los mandatarios asistentes se faja los pantalones y le dice a Calderón que al menos uno de los alcaldes de su ciudad capital llegó al puesto por aportaciones del narcotráfico, y que no imagina que termine su trienio vivo. Por mencionar sólo uno de los temas que frenan un pacto en el que cada quien haga su parte.

CARLOS ORVAÑANOS, jefe delegacional panista en Cuajimalpa, se valió de una mentira para apuntalar su informe de trabajo: el despliegue del Metrobús hacia Santa Fe, lo que no podría ocurrir sino después del 2012, cuando ya no esté en su puesto.

lunes, 4 de octubre de 2010

Partidos: Los reacomodos

El PRI inició ajustes hacia la carrera del 2012; en el PRD se afianza la candidatura de Marcelo Ebrard. Es en el PAN donde las incógnitas prevalecen.

A la familia de EL UNIVERSAL,
en su 94 aniversario.

En forma más o menos discreta, el PRI perfiló durante semanas a Humberto Moreira –gobernador saliente de Coahuila- no sólo como el sucesor de Beatriz Paredes en la presidencia, sino como árbitro confiable para la contienda interna, con la certidumbre de que no se repetirá el deliro del 2000, cuando el dirigente partidista operó para convertirse él mismo en candidato.

El arribo de Moreira estuvo acompañado de una operación fina para garantizar respeto y espacio a quienes, como Emilio Gamboa o Jesús Murillo, contaban con argumentos y músculo para ser el relevo de la tlaxcalteca, quien regresará a la Cámara de Diputados no para disputar a Francisco Rojas la coordinación de la bancada sino para presidir la Mesa Directiva, que le fue encomendada a José Carlos Ramírez Marín.

Moreira pedirá licencia este año para recorrer el país con vistas a la sucesión partidista de marzo. Ha establecido compromisos y garantizado civilidad, lo que incluyó la semana pasada un encuentro con el presidente Calderón. Con el apoyo de Manlio Fabio Beltrones y de Enrique Peña Nieto, los dos principales presidenciales del tricolor, encontró sin embargo poco entusiasmo en Paredes. Ello atraerá un pacto que mantendrá a Beatriz con la proyección necesaria para ser tercera en una eventual discordia Peña-Beltrones, pero lo más probable es que arribe a una nueva apuesta por el gobierno del Distrito Federal.

En la capital del país, Marcelo Ebrard presumió el jueves una alianza con sectores claves del PRD, al presentar la Fundación Equidad y Progreso que es su plataforma de lanzamiento rumbo a la candidatura presidencial, sin que ello garantice un frente de izquierda, pues Andrés Manuel López Obrador insistirá en una segunda candidatura que correría bajo las siglas del Partido del Trabajo.

La alianza de Ebrard con diversas corrientes perredistas, notablemente Nueva Izquierda, de Jesús Ortega, era justo lo que López Obrador intentó evitar con el frustrado intento por derrocar a Ortega de la dirigencia partidista.

Pero el pacto Ebrard-Ortega puede imponerle al primer el compromiso de alentar la candidatura no de Mario Delgado, su secretario de Educación y claro “delfìn”, sino acaso del coordinador senatorial Carlos Navarrete, sin duda uno de los elementos con más luces dentro del grupo que preside Ortega.

Frente a estos reacomodos en PRI y PRD, Acción Nacional no luce sólo rezagado, sino opaco y medroso. La noticia del día en el panismo es la boda de César Nava, el dirigente que cayó de la gracia del presidente Calderón y que atendió, sumiso, la orden de hacerse a un lado para el arribo del insípido senador Gustavo Madero, quien no imprimirá a su partido más que subordinación absoluta. Francisco Ramírez Acuña, quien desea relevar a Nava pero no goza del aval de Los Pinos, sigue en la batalla buscando votos de delegados para la asamblea partidista, pero el tiempo se le agota.

Apuntes: Batalla en Edomex

EL CANDIDATO de Enrique Peña Nieto para su propio relevo en el estado de México es un tema de alta política, ante la obviedad de que un descalabro puede desbarrancar sus posibilidades en 2012. Los aspirantes naturales son Alfredo del Mazo, alcalde de Huixquilucan; Ernesto Némer, líder del Congreso local; Eruviel Ávila, edil de Ecatepec, e incluso la también alcaldesa Azucena Olivares, de Naucalpan. Pero hay preocupación de que un priísta notable migre a una coalición opositora. Las luces rojas están sobre Ávila y sobre el diputado Manuel Cadena, lo que ha despertado la inquietud en diversas esferas del Institucional para garantizar equidad a los participantes y quizá contener las ansias de destapes hasta que la oposición presente a su abanderado.

EL TURISMO nos trajo la única buena noticia en semanas, por conducto de la titular del área, Gloria Guevara, quien durante su comparecencia ante senadores reportó un crecimiento en visitantes internacionales y de ingreso de divisas a nuestro país durante el presente año, en este sector. El último de rubros creció más de 8%, con cifras a julio.

domingo, 26 de septiembre de 2010

Periodistas: Tareas pendientes

Los compromisos anunciados por el presidente Calderón para frenar los homicidios contra periodistas sólo se cumplirán con un gremio y una sociedad organizados.

Menos de 24 horas después de que el presidente Calderón asumiera compromisos concretos ante organismos internacionales protectores de la libertad de expresión, integrantes del Gabinete de Seguridad reunidos el jueves último en Los Pinos, recibieron instrucciones de presentar un programa de trabajo orientado a la protección de periodistas.

En la agenda presidencial –al menos, en la pública- quedaron marcadas asignaturas pendientes como el impulso a reformas legales que combatan la impunidad en casos de agravios a periodistas, agraven penas de los respectivos delitos y permitan que en algunos de éstos no prescriba la responsabilidad de los autores materiales e intelectuales.

Durante la gestión de Calderòn Hinojosa se ha disparado el número de ataques a periodistas, no como un “daño colateral” del crecimiento de la violencia, sino producto de una estrategia clara de las mafias para controlar no sólo rutas y mercados, sino también la información que consume la sociedad.
Por el camino que recorre actualmente la nación, donde la prensa es amedrentada, amordazada o asesinada, se multiplica el riesgo de que concrete la existencia de un narco-Estado. De llegar ese día, no habrá quién alerte de ello, ni quién pueda impedirlo. La sociedad carecerá de ojos, oídos y músculo para evitar el infierno.

Asumiendo que el compromiso de Calderón es auténtico, difícilmente se avanzará en esta agenda si otros sectores no hacen también su respectiva tarea, lo mismo los medios de comunicación, el gremio periodístico y el conjunto de la sociedad civil, acompañando y respaldando, pero también empujando a los órganos del Estado, tan diestros para atorarse en la maraña de los intereses creados y la burocracia.

Cada vez resultan más claras las tareas que le corresponden a la prensa en esta circunstancia: profesionalización de reporteros y editores, lo mismo en el plano operativo ante coberturas de la violencia, que en el campo ético. En esta última línea, las redacciones deben comenzar a ser limpiadas de aquellos que tienen nexos con las mafias, los que son tan discretos como un elefante en un elevador.

A naciones como Colombia le tomó al menos una década desarrollar mecanismos esencialmente eficaces contra las mafias de las drogas, tanto en el ámbito gubernamental como en el gremial. Con toda la complejidad del proceso colombiano, allá las cosas son jurídicamente más fáciles, pues si bien se trata de un régimen central, no federal, por lo que aquí es obligada la participación de los estados para integrar un sistema de protección y medidas cautelares para periodistas amenazados.

Es urgente contar con un monitoreo científico e independiente de estos casos, que permita darles seguimiento de manera sistemática y determinar, con el mayor rango de prueba posible, cuándo los referidos ataques han tenido como motivo el ejercicio de la libertad de expresión.

Una tarea inaplazable es desarrollar una red de solidaridad con los medios de comunicación de estados y regiones que experimentan todos los días, en carne propia, los riesgos de cubrir la amenaza que representa el crimen organizado en las comunidades a las que buscan servir. Ya diversos medios nacionales han ensayado algunas medidas en esta línea, con éxito reconocible.
Estos esfuerzos deben encontrar su verdadero alcance en una mayor participación de la sociedad, la cual debe determinar cuál es su lugar en esta batalla. Unidos, todos, sí podemos.

Apuntes: La voz del rector
JOSÈ NARRO ha ofrecido un nuevo rostro con el telón de fondo del centenario de la UNAM. Su voz a favor de un mejor país ha traído viento fresco a los discursos chatos y mezquinos que permean nuestra política.

EL MINISTRO José de Jesús Gudiño Pelayo generará con su súbita y lamentable muerte un vacío en la Corte donde fue factor de equilibrio, con una visión en favor de ampliar los derechos ciudadanos.

CANCÚN, el principal polo turístico del país, agoniza bajo el crimen organizado, que lo mismo controla ejecuciones y narcomenudeo que extorsión de negocios locales. En un clima donde todo se vale, autoridades locales, estatales y federales se entregan a negocios rápidos.

lunes, 20 de septiembre de 2010

DF: elecciones sin ciudadanos

Es posible que la capital del país se halle a la vanguardia en diversos campos, pero la apertura hacia la participación vecinal no es algo que la distinga.

Once años le ha tomado a la ciudad de México organizar la primera elección de representantes vecinales desde que en 1999 un ejercicio de esta naturaleza resultó frustrado por la apatía del gobierno perredista, que llegaba entonces a su segundo año en el poder.

En aquella oportunidad, el ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas –que en 1997 conquistó la primera elección de jefe de gobierno del DF- habría sido convencido de que la estructura clientelar del PRI se apoderaría de la red de representantes vecinales que serían electos. El proceso no atrajo apoyo institucional alguno, y el escaso caudal de votos impuso a los beneficiarios tal debilidad tal que acabaron esfumándose.

Quizá usted lo ignore incluso si es habitante del Distrito Federal, pero el 24 de octubre habrá elección de Comités Ciudadanos, en apego la Ley de Participación Ciudadana, reformada recientemente bajo criterios opacos y como producto de una negociación entre bloques del perredismo, a lo que se plegó la lideresa de la Asamblea capitalina, Alejandra Barrales.

La ley establece ahora que los Comités Ciudadanos tendrán peso real en las delegaciones, colonias y pueblos; dispondrán el destino de un porcentaje importante del presupuesto delegacional así como de recursos para operar, que les debe proporcionar el Instituto Electoral del DF, al que se le impusieron compromisos que no corresponden con su perfil jurídico ni con el presupuesto asignado.

La ausencia de un presupuesto mínimo para organizar estas elecciones está haciendo que el proceso agonice por inanición.

La Asamblea del DF se distingue ya por su desaseo político y jurídico, por no mencionar el mediocre perfil de muchos de quienes integran la mayoría perredista. No es posible decir gran cosa tampoco de los bloques opositores, del PAN o del PRI, cuyas bancadas han sido incapaces de constituir un contrapeso real ante el grosero manoseo que se hace en los trabajos de ese cuerpo presumiblemente colegiado.

La elección de Comités Ciudadanos prevé periodos de entrega de formatos para el registro de fórmulas en lo pocos más de siete mil colonias y pueblos que forman en Distrito Federal, según una nueva cartografía diseñada por el IEDF. Este órgano contaba con otra cartografía que le tomó más de dos años realizar con un costo de 12 millones de pesos, pero que por orden de los partidos fue tirada a la basura.

Hacia principios de este mes, sólo medio centenar de grupos ciudadanos había solicitado los formatos para registrar su planilla. De pronto, se produjo el milagro de la multiplicación de los panes, y en unas cuantas semanas el número de registros se acercó a los nueve mil.

Ya la prensa ha dado cuenta de delegados perredistas que citan a personajes diversos –no a ciudadanos, pues ello exige una vocación cívica independiente- a los que les ordenan formar una planilla, con la visión lógica de tener representantes a modo y crear desde ahora una red electoral hacia la elección del nuevo jefe de Gobierno, en 2012.

Dos delegados, Francisco Sánchez, en Iztacalco, y Víctor Hugo Lobo, en Gustavo A. Madero, acumulan denuncias formales del PRI ante el IEDF por esas prácticas, que según se sabe, se multiplican en las muchas delegaciones donde tiene influencia el controvertido René Bejarano y su esposa Dolores Padierna.

El proceso ha puesto en alerta a decenas de asociaciones vecinales que durante décadas han realizado un legítimo trabajo de representación, que la ley en la materia simplemente ignora. Lo mismo puede decirse de agrupaciones empresariales, de comerciantes o desarrolladores inmobiliarios, que por años han sostenido interlocución con autoridades delegacionales. Al parecer, pasarán también al limbo, o deberán pelear, con los dientes, para ser escuchados.

Mañana martes, cuando el jefe de Gobierno del DF, Macelo Ebrard, rinda su cuarto informe en la Asamblea, podrá documentar aspectos en los que la izquierda en el gobierno ha construido una vanguardia.

Sin embargo, el tema de la participación vecinal sigue siendo una asignatura pendiente en la ciudad, y nada permite suponer que ello cambie tras la elección del próximo 24 de octubre.

lunes, 13 de septiembre de 2010

Desdén por grupos vulnerables

A Colombia le tomó 15 años crear una estrategia para proteger de la violencia organizada a diversos sectores. El Estado mexicano da traspiés al respecto.

La Secretaría de Gobernación ha iniciado cabildeos con el Congreso para crear un órgano que extienda medidas de protección para periodistas amenazados bandas criminales.

La idea puede ser sensata, pero luce animada tan sólo para fines mediáticos, sin metodología ni alcances claros. Incluso, la “letra pequeña” de la propuesta prevé acciones que pueden ser lesivas contra la libertad de expresión, que formalmente busca proteger.

En el año 2000, tras lustros de violencia a cargo de la guerrilla, el narcotráfico y las bandas paramilitares, el Estado colombiano creó un programa que identificó a 16 sectores de la población con mayor vulnerabilidad frente a la violencia. Ello incluye a defensores de derechos humanos, a alcaldes en zonas controladas por la criminalidad, a periodistas, a sindicalistas y a líderes comunitarios expulsados de sus poblaciones. Se trata de proteger a miembros de la sociedad cuya tarea representa en estas circunstancias un dique contra la descomposición. De ahí que su eliminación física pueda atraer un impacto mayor en la sociedad.

Este es el espejo en el que nos debemos ver en México. Es preciso que el país cuenta con una estrategia similar, que detecte sectores en riesgo y construya un entramado de medidas de prevención y protección, que frene la actual escalada de muertes que presenciamos entre personajes clave dentro de la población civil.

En los 10 años que ha operado el referido programa en Colombia, cientos de integrantes de poblaciones en riesgo han sido entrenados para no incurrir en mayores peligros, han recibido radios de comunicación para comunicarse con la policía, usado por lapsos breves vehículos blindados o tenido la protección de guardaespaldas. En este 2010, 170 de ellos están bajo este esquema. En promedio, sólo 2% del total de beneficiados por el programa eran periodistas.

A diferencia de Colombia, que es Estado central, no una Federación, en México sería preciso construir una red de estos programas, por lo menos en aquellos estados mayormente afectados por la violencia.

Pero existirían muchos aspectos por resolver. Por ejemplo, qué hacer si la amenaza viene del propio ámbito local, incluso de esferas públicas de alto nivel estatal. En la experiencia colombiana se acepta que una deficiencia de su programa es que no incluye un componente contra la impunidad de los criminales. Y tampoco se protege a la familia de los personajes amenazados, muchos de los cuales no se pueden dar el lujo –como han hecho tantos gobernadores mexicanos- de sacar del país a su esposa e hijos.

El modelo que se discute en el gobierno mexicano se concentra en periodistas y se discute si incluirá a defensores de derechos humanos. Una versión de esta propuesta, mostrada a relatores de ONU y OEA, busca imponer a los medios compromisos sobre los que no existe consenso alguno. Entre otros, la creación de un colegio de periodistas que acredite tal condición a quienes ejercen este oficio.

La colegiación obligatoria de periodistas ha sido una larga tentación autoritaria en América Latina. La Corte Interamericana de Derechos Humanos tiene jurisprudencia en contra. Se trata, de plano, de una pésima idea.

Urge que la autoridad transparente los alcances de sus propuestas, aliente el debate público sobre éstas y construya una estrategia en verdad integral de protección a sectores vulnerables frente al crimen organizado.

Apuntes
“LA BARBIE”, el sanguinario capo cuya presencia en horario triple “A” de las televisoras sólo sirvió para que millones de personas notaran su risa burlona, sigue causando bajas a las fuerzas del Estado. El presidente Calderón desmintió ante CNN que la captura haya sido realmente una entrega, pero no aludió al presunto reporte policiaco según el cual la detención fue producto de un incidente de tránsito. El tema rebasó al vocero oficial para temas de seguridad, Alejandro Poiré, quien aún no cumple un mes en el cargo. Otro aspecto incomprensible de esta historia es por qué si se conocen desde hace años los crímenes de Edgard Valdés, está arraigado. ¿No había órdenes de aprehensión en su contra, que obligaran a entregarlo a un juez desde el primer momento?

lunes, 6 de septiembre de 2010

TV digital: ¿Cuál competencia?

El decreto que apresura la digitalización de las señales televisivas no avala el anuncio presidencial de mayor pluralidad en este campo, dominado por dos corporaciones.

Ante un entorno caótico en materia de telecomunicaciones, la administración Calderón reservó el “golpe mediático” del cuarto informe presidencial para presentar un decreto que se limita a cambiar el plazo para que el público deseche su televisor analógico y compre un receptor digital.

El decreto presidencial no garantiza mayor competencia en materia televisiva, no modifica el “regalo” hecho en 2004 por Vicente Fox a las televisoras al prorrogar hasta 2021 todas sus concesiones. Tampoco limita la posibilidad de que las dos corporaciones de las que depende 94% del negocio de la televisión controlen una mayor tajada del pastel. Un ejemplo de ello es el servicio HiTV, de Televisión Azteca, que aprovechó el espectro digital para crear un nuevo negocio.

Mientras en Estados Unidos existe absoluta claridad sobre lo que traerá el futuro tecnológico –léase “The National Broadband Plan”, de la administración Obama-, México chapotea en un pantano de contradicciones, donde gobierno, empresarios y sociedad dirimen a dentelladas la política de telecomunicaciones, clave para el crecimiento económico, educativo y democrático de la nación.

En lo que sí fue eficaz el anuncio de Los Pinos fue en desviar la atención sobre las polémicas licitaciones 20 y 21, que desataron una guerra –política, jurídica, empresarial- fuera y dentro de la errática Cofetel. Su presidente, el novato Mony de Swan, nos regaló el edificante espectáculo de insultar por Twitter a uno de sus colegas, el comisionado Rafael del Villar, por el crimen de tener criterio propio.

A esto se agregan el enorme rezago en banda ancha, los amparos sin fin de una concesionaria –Iusacel- para no pagar derechos; la batalla de una más –MVS- para evitar ser despojada de espectro; los obstáculos a que Carlos Slim ofrezca televisión, y los reclamos de telefónicas por falta de equidad en el sector.

De espaldas a este desastre, escuchamos al citado De Swan y al propio secretario del sector, Juan Molinar Horcasitas, hablar de subsidios para 23 millones de propietarios de televisores para facilitar la transición digital. Ambos repiten la profecía de Calderón de que esto traerá mayor competencia, cobertura, convergencia, democracia…

Por ignorancia o mala fe, lo que ellos dicen no resiste el menor análisis. En México existen 27 millones de hogares, según el INEGI. En ellos hay, efectivamente, 23 millones de televisores, de acuerdo con la misma fuente. Pero de éstos, 3.6 millones ya son digitales, de acuerdo con reportes oficiales. Y hay más de ocho millones de suscriptores de televisión restringida, que ya cuentan con un decodificador. Los números, por tanto, son muy diferentes. Y otorgar millones de bonos con subsidios en 2011 y 2012, años electorales, arrojará un tufillo clientelar inocultable.

Si el gobierno en verdad asumiera un compromiso con la competencia en televisión, no tendría por qué esperar. En la banda UHF (donde se ubican los canales 22, 28 o 34) existen 10 concesiones, pero caben 17, hasta llegar al canal 69, sin violentar el espacio de 6 megahertez de separación entre cada señal. Incluso puede establecerse al menos una nueva cadena nacional, si los concesionarios actuales –varios de ellos gubernamentales- son reacomodados con tal fin.

Calderón ya no será presidente en 2015, cuando se consume su propuesta del “apagón analógico” que según dice, nos traerá mayor pluralidad en la televisión. Pero puede alcanzar esa meta hoy. Ser el presidente del cambio, al menos en este ámbito.

El problema es que no quiere. O no puede. O no lo dejan. O las tres cosas.

Apuntes

COMITÉS VECINALES serán electos en el DF el 24 de octubre, de acuerdo con una ley aprobada sobre las rodillas en la Asamblea de Representantes que encabeza la perredista Alejandra Barrales. Esa institución, más el tribunal y el instituto electorales de la capital del país tienen las encomienda de organizar el proceso. Pero Barrales está saboteando los trabajos, la llave del dinero fue cerrada y, en cambio, se soltó las manos a operadores del perredismo controlados por René Bejarano, como el legislador Leonel Luna o los delegados Francisco Sánchez, de Iztacalco, y Eduardo Santillán, de Álvaro Obregón. Se teme una regresión en el campo cívico.

lunes, 30 de agosto de 2010

Migrantes: complicidad e hipocresía

En toda una década, la transcurrida durante la presencia no sólo del PAN en el gobierno sino de una intensa pluralidad partidista en el Congreso de la Unión, el tema de las corrientes migratorias por nuestro país no mereció sino algunos comunicados oficiales, más declaraciones aisladas de algún legislador.

En la comunidad religiosa, académica y de derechos humanos, sin embargo, el deterioro de las condiciones de vida que enfrenta la comunidad migrante, en especial la centro y sudamericana —400 mil personas anualmente, según cálculos de la ONU— ha hecho crecer la alarma y la indignación ante evidencias de que mafias y autoridades construyeron un negocio a partir del secuestro, la extorsión y la masacre sistemática de una población miserable, inerme, notablemente vulnerable. En los hechos, un crimen de lesa humanidad, en las narices del Estado mexicano.

Hoy, ante la masacre de migrantes en un rancho de Tamaulipas, el país se entera que hacia 2003 este drama rebasaba ya las fronteras de lo racional. Que en 2006 se multiplicaban denuncias en el sur y sureste del país contra bandas que secuestraban migrantes para exprimir a sus familias los últimos dólares. En 2007, tras una denuncia de la Iglesia y varias agrupaciones de Oaxaca, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) emitió una recomendación sobre el tema.

En 2009, Mauricio Farah, entonces funcionario de la CNDH, publicó un estremecedor reporte acompañado de testimonios escritos y en audio. El documento consigna que hasta 10 mil secuestros de esta naturaleza podrían estarse presentando cada seis meses. Que policías locales y estatales retienen a los migrantes —a veces por centenares— para entregarlos a las mafias. Que en numerosas comunidades todos, menos la autoridad, saben dónde se plagia a los migrantes, cómo se les traslada a las casas de seguridad y dónde están éstas. Que cuando el Ejército descubre alguna de esas casas, los responsables son liberados casi inmediatamente por el agente del Ministerio Público.

En los testimonios recogidos en el trabajo conducido por Mauricio Farah —y que se repiten en los refugios para migrantes indocumentados establecidos en el norte del país— se da cuenta de la brutalidad que hoy caracteriza el trato hacia esa comunidad. A ello se agrega el desdén del legislador ante los reclamos para reformar la Ley General de Población, que promueve el hostigamiento y la discriminación contra los migrantes. Todo agudiza la hipocresía de quienes hacen llamados para que en Estados Unidos se respeten la condición humana y los derechos de nuestros propios migrantes.

Los migrantes masacrados en Tamaulipas habían sido secuestrados en Chiapas. Su exterminio no es sólo un ejemplo de barbarie. Parece un mensaje más de las mafias asesinas. ¿Habrá una respuesta del Estado, de la nación entera, ante esta vergüenza mundial? El silencio y la falta de acciones sólo pueden ser muestras de complicidad y cobardía.

Apuntes: Manotazo priísta

EL DIPUTADO tricolor José Carlos Ramírez Marín, de origen yucateco, será designado este miércoles —si no hay cambios de última hora— presidente de la Mesa Directiva, lo que sepultará el acuerdo concertado a principios de la legislatura, según el cual el cargo lo ocuparían, en ese orden, PAN, PRD y PRI. El Institucional no sólo castiga así las alianzas electorales sino que manda la señal de que hará política dentro de los otros partidos para debilitar la posibilidad de que el próximo año surjan nuevamente estos bloques.

GUSTAVO MADERO, insípido líder senatorial, medroso precandidato a la gubernatura de su estado, Chihuahua, arrancó campaña hacia la presidencia del PAN, aupado en las anca de Los Pinos. José González Morfín, a quien también se ubicaba en esa ruta, será el sucesor de Madero como coordinador blanquiazul en la Cámara alta.

EN MONTERREY, luego de que la iniciativa privada publicó un desplegado en protesta contra el crimen, las mafias parecieron responder contra personal de seguridad de un importante corporativo. Y se multiplican las voces para que el gobierno de Rodrigo Medina aclare dónde se pudrió la suerte de la que fuera la ciudad símbolo de modernidad y esfuerzo.

lunes, 23 de agosto de 2010

Nuevo León: la voz del patrón

El reclamo del empresariado regiomontano resiste varias lecturas. Se trata de la exigencia de un sector acostumbrado a hacerse obedecer por los políticos.

Hundido en el narcotráfico, maniatado por la corrupción policial y la incompetencia de los gobernantes, Nuevo León se desliza hacia el riesgo de que se consoliden grupos paramilitares financiados por capitales privados, ante la falta de eficacia de los cuerpos federales de seguridad pública. Este fenómeno, ya conocido en otras naciones afectadas por el crimen organizado, no representa ni de lejos una solución, sino el agravamiento de la pesadilla.

En meses recientes se multiplicó el número de licencias de portación de armas extendidas a cuerpos privados de seguridad en la entidad, tras una petición que habría sido hecha directamente el presidente Calderón por los empresarios de Nuevo León. Hoy al parecer han decidido ir más allá. La caricatura intentada por el acaudalado alcalde de San Pedro, Mauricio Fernández, con su cuerpo de “niños malos”, es ya el huevo de la serpiente.

Los patrones regiomontanos han tenido siempre peso en el país. A nivel local, son clave para determinar quién llegará a la gubernatura. Y en más de una ocasión han echado del cargo a quien pierde su confianza.

Estos capitanes de empresa figuraron entre los principales mecenas de la campaña de Felipe Calderón. ¿Es posible que alguno de ellos estén teniendo la afiebrada idea de que pueden dar un manotazo en la mesa al Presidente?.

En un desplegado publicado el pasado día 18, la iniciativa privada local “exige” al gobierno federal tres batallones más de soldados y uno de marinos (algo así como 20,000 elementos adicionales) para enfrentar la actual ola de inseguridad, que incluye crímenes, secuestros y extorsiones. Asimismo, hace reclamos al gobierno de Rodrigo Medina y a los alcaldes del estado, uno de los cuales, el panista Edelmiro Cavazos, fue secuestrado la víspera y encontrado muerto el mismo día del desplegado. Sus asesinos habrían sido integrantes de su propia policía, implicados con las mafias del narco, como se presume lo están el resto de las corporaciones municipales y la propia del estado.

Claridoso casi al extremo, el referido desplegado es omiso en un punto central: carece de la mínima autocrítica

El crecimiento del crimen en Nuevo León se ajustó al patrón: Zona de trasiego de drogas, consumo desatado entre jóvenes y clases adineradas. Los narcos usaron zonas residenciales para “disimular” a sus familias, y compraron en efectivo residencias a vecinos y empresarios, que recibieron gozosos el dinero y abrazaron a los nuevos ricos como amigos, socios y compañeros de juegos de sus hijos e hijas.

A un ex gobernador del estado nunca pareció inquietarle el reporte de inteligencia de que una de sus hijas convivía en la escuela con los retoños de un conocido mafioso. Hoy ya nadie se asombra de los ejemplos de tolerancia que surgieron en los tres últimos lustros desde el gobierno y la sociedad regiomontana hacia los barones de la droga. Entender esto y enfrentarlo ayudará a encontrar salidas para la pesadilla.

Apuntes

JOSÉ ANDRES CASCO es un personaje que desde hace muchos años habita las penumbras de la administración federal, como operador de polémicos negocios, especialmente en el ámbito agropecuario. La Secretaría de la Función Pública recién anunció acciones legales en su contra por negocios ilícitos cuando Casco se desempeñó en el Sistema de Administración y Enajenación de Bienes (SAE), uno de los muchos cargos que ocupó gracias a sus protectores, lo que incluye a Luis Téllez, a Javier Usabiaga y a Francisco Mayorga, actual titular de Sagarpa, donde Casco influye a trasmano en el manejo de ese barril sin fondo que se llama Aserca.

ADIOS A NAVA. El actual presidente del PAN, César Nava, no continuará en el cargo. El desgaste de su relación con el presidente Calderón es insostenible, según fuentes consultadas por este espacio. En la asamblea de diciembre habrá relevo, cuyo nombre ya se baraja en Los Pinos. Cómo andarán las cosas que va punteando el tímido líder senatorial Gustavo Madero. Francisco Ramírez Acuña la busca también, por fuera, pero se duda que le alcancen los votos.

lunes, 16 de agosto de 2010

Diálogos sin confianza

Luce infectada por la suspicacia la ronda de encuentros convocados por el presidente Calderón con el propósito de oxigenar el debate sobre el combate al crimen.

Quizá sea el formato: abierto, de cara al país. Si bien encierra los beneficios de toda casa de cristal, al carecer de privacidad debilita la profundidad de las propuestas, inhibe los cuestionamientos al actual orden de cosas y complica el seguimiento de compromisos.

Acaso sea la atmósfera de improvisación. Con apenas unas horas de antelación –unos días, en el mejor de los casos-, se cita a representantes de sectores, con el apremio de llevar propuestas de solución a una problemática que ha tenido atrapado al mundo por más de medio siglo. Y se les impone micrófono y reflectores lo mismo a líderes de organizaciones sociales que a jerarcas religiosos, o a integrantes de otros poderes, como el Judicial o gobernadores.

Tal vez no han cicatrizado agravios de los procesos electorales que este año tensaron políticamente y atrajeron pugnas entre actores locales, el gobierno federal y líderes de los partidos, incluso en torno a personajes concretos, como mandatarios estatales o el jefe de Gobierno del DF, que tuvieron un gran protagonismo en el auspicio de candidaturas.

Es posible que sea la suma de esos factores y otros más. El punto es que este ejercicio presidencial para oxigenar el debate sobre la batalla contra el crimen organizado, el narcotráfico y el consumo de drogas está despertando pocas certezas y muchas suspicacias, que se expresan en preguntas específicas.

Cómo expresar ahí -dijeron gobernadores consultados por este espacio- que un eje del problema es la “otra guerra”, la que libran en forma cada vez más abierta los jefes del Ejército, la Policía Federal y la PGR para hacer que prevalezca si postura sobre la estrategia a seguir, lo que deriva en ausencia de estrategia.

Cómo plantear en público al Presidente, sin causar pánico nacional –comentaron ministros de la Corte y funcionarios del Consejo de la Judicatura-, que los jueces federales ya no desean tomar casos ligados con narcotráfico; que en estados clave afectados por el crimen, como en Sinaloa, los juzgados federales se están quedando vacíos por renuncias, ante amenazas, “levantones” y agresiones, incluso asesinatos. Que funcionarios federales trasladan reos de alto peligro o deciden construir cárceles sin tener en cuenta el impacto que generan en el ámbito de los jueces.

En la misma línea de preocupaciones se han recogido pronunciamientos de casi todos los sectores que han acudido al llamado de Los Pinos. Es previsible que este fenómeno se agudice cuando el ciclo sea cerrado con la presencia de líderes parlamentarios, colocados al final de la ronda con el ánimo expreso de hacerlos recoger las iniciativas planteadas en estos foros.

La determinación del presidente Calderón ha abierto las ventanas por las que entra aire fresco en esta discusión, pero el ejercicio puede reducirse a relumbrón mediático y perderse una oportunidad valiosa, si al final son cerrados de nuevo los espacios de discusión, en lugar de aprovechar la positiva coyuntura para generar condiciones en favor de una deliberación de más largo aliento.

Apuntes: SCT, en el ácido

LA COFETEL mantenía anoche incomunicados a sus cinco integrantes, quienes deben resolver hoy sobre la licitación de espectro radioeléctrico que ganó en solitario el consorcio Televisa-Nextel, a un precio considerado una ganga. Los comisionados, que encabeza Mony de Swan, y el propio titular de la SCT, Juan Molinar, enfrentan una durísima presión política y corporativa para que el proceso sea declarado desierto, así como acciones judiciales que podrían impedirles seguir adelante con su peculiar visión sobre cómo incorporar a nuevos competidores al negocio de telefonía móvil e Internet.

LOS RELATORES de Libertad de Expresión de la ONU y la OEA, Frank la Rue y Catalina Botero, atestiguan durante su visita de inspección a México claros rezagos en derechos esenciales, lo que incluye retrocesos en materia de acceso a la información pública, abusos contra la población por parte de fuerzas del orden, asesinatos contra periodistas, concentración de medios y freno a radiodifusoras comunitarias. La diplomacia mexicana opera para que el reporte oficial de la visita no destaque la apatía y el desorden que dominan en el gobierno sobre estos temas.

lunes, 9 de agosto de 2010

¿Se lo decimos al Presidente?

A la memoria de Fidel Samaniego.
Periodista ejemplar y compañero solidario.

“Díganme quién falla”, clamó el presidente Calderón el pasado miércoles, reunido con jerarcas religiosos ante quienes planteó su certeza de que los hombres de Iglesia saben quiénes son los alcaldes, los jefes de policía, incluso los gobernadores cómplices del crimen organizado. Es muy posible que lo sepan, pero es improbable que se lo vayan a decir.

Quizá ninguno de los asesores que le prepararon ese encuentro haya dicho al mandatario que desde hace muchos meses dignatarios eclesiásticos, especialmente del norte del país, entre ellos Raúl Vera, discuten en privado las experiencias de la Iglesia en realidades como la lucha de Italia contra las mafias, donde los sacerdotes han tenido un papel clave del lado de la sociedad y el gobierno para erradicar a los criminales.

Producto de esas deliberaciones surgió la denuncia en Durango sobre las frecuentes visitas del Chapo Guzmán —cuyas estrategias e impunidad, por cierto, lo hacen cada vez parecido al colombiano Pablo Escobar. Pero esa voz de alerta sólo despertó la apatía oficial y una andanada de críticas semioficiales contra el obispo que con su dicho estaba exponiendo la vida.

Habría que informar al Presidente que en sectores religiosos circula un reporte sobre la fuga del citado Chapo Guzmán, en los primeros meses de la administración Fox. Se cita que la Comisión de Derechos Humanos de Jalisco alertó públicamente que se preparaba una fuga con la connivencia de autoridades del penal de Puente Grande, muy cercanas a funcionarios federales que hoy siguen en la administración pública. El entonces delegado de la PGR en el estado sí fue cesado: le tomó 10 horas informar de la evasión a su jefe, el procurador Rafael Macedo.

En este mismo ciclo de encuentros, Calderón ha dejado correr la bola sobre la legalización de la mariguana. Alguien debería recordarle al Presidente que apenas en marzo, durante su visita a Washington, dijo en entrevista con la CNN que un debate sobre este tema es “inútil” si no es comenzado por Estados Unidos. También habría que decirle al Presidente que el mundo no habla de “legalizar” sino de “despenalizar” el consumo de drogas blandas, especialmente la mariguana, lo que ya ocurre en muchos lugares de la Unión Americana, menos en el hipócrita discurso oficial, idéntico en el último medio siglo.

Pero acaso el más desafortunado “Diálogo” del mandatario haya sido con los medios de comunicación. De la reunión, privada, surgió un comunicado oficial que revela que el gobierno indujo supuestos compromisos a cumplir por parte de directivos periodísticos, sin citar ninguna aportación de la parte oficial.

Alguien debe decir al Presidente, urgentemente, que esos compromisos son imposibles de cumplir en su mayoría, especialmente por la torpe y miope estrategia oficial de comunicación en materia de combate al crimen organizado. Pero especialmente, porque no corresponde al gobierno sino a los propios medios decidir en libertad, las acciones que en lo individual, como gremio o industria, deben asumir ante esta realidad.

Apuntes: Mini-maximatos

LOS ESTADOS que eligieron gobernador este año presencian un burdo acomodo a la medida del mandatario saliente, en todas aquellas entidades en donde el PRI ya gobernaba. Se construyen así maximatos regionales que quitarán oxígeno a la vida pública, impedirán la movilidad política y eternizarán intereses creados. Curiosamente, en los estados en donde ganó la oposición en alianza las cosas pueden pintar peor, si triunfan las presiones de gobernadores del pasado que intervinieron en favor de los candidatos ganadores, todos de origen priísta. Es el caso de Melquidades Morales, en Puebla, y de José Murat, en Oaxaca. Ya se verá si se los pueden sacudir, respectivamente, Rafael Moreno Valle y Gabino Cué. Pero quizá el caso más agudo sea Sinaloa, donde Mario López, el popular Malova, luce acorralado por el grupo del ex gobernador Juan Millán, presto a copar cargos y presupuestos.

LA SUPERVÍA, una obra vial clave para conectar al sur-poniente del DF, cargaba ya un pésimo manejo de comunicación con la comunidad interesada, pero ahora surgió “fuego amigo” sobre el jefe de Gobierno capitalino, Marcelo Ebrard, quien es objeto de presiones por parte de grupos radicales del PRD para impedirle, entre otros afanes, dejar como sucesor a Mario Delgado, ex tesorero y ahora secretario de Educación.

lunes, 2 de agosto de 2010

La prensa secuestrada

El cautiverio de periodistas de medios con impacto nacional es, pese a su gravedad, una pálida imagen de lo que enfrentan desde hace años diaristas de todo el país.

Puede ser difícil, pero acaso podamos imaginar el impacto que en angustia e incertidumbre trajo entre sus familias y colegas, el secuestro por varios días de periodistas que laboran en Televisa y Milenio Televisión.

Podría resultar mucho más difícil entender cómo sigue adelante la vida de las familias y los compañeros de al menos una docena de periodistas de los estados que un mal día fueron hechos desaparecer y que luego de meses, incluso años, nada se sabe de ellos. Sus historias encaran no sólo la apatía de las autoridades sino el desdén e incluso el escepticismo de muchos de sus colegas, que calman su conciencia con la presunción de que aquellos pares suyos quizá andaban en malos pasos con el crimen.

¿Qué decir de la muerte impune de medio centenar de periodistas durante la administración del presidente Calderón? ¿De las limitaciones operativas y jurídicas de la fiscalía federal creada al efecto? ¿De la impotencia y en ocasiones, la complicidad de los gobiernos estatales donde esos periodistas se desempeñaban? ¿De la miopía de los Congresos, los estatales y el federal, que deben ofrecer un nuevo marco jurídico para enfrentar este drama que daña no sólo la vida de los informadores sino los derechos de las comunidades a los que ellos buscaban servir?.

Directivos de Televisa y Milenio Televisión determinaron en soledad la conducta a seguir frente a exigencias de los secuestradores, lo que seguramente supuso un colosal desafío para la responsabilidad social de esos medios, y de otros muchos que frente a los hechos, adoptaron determinaciones para publicar o no ciertas informaciones, apoyados en su libertad, convicciones y marco ético.

Desde hace años, periodistas en diversas regiones del país reciben cotidianamente presiones por parte del crimen organizado para ocultar o privilegiar ciertas noticias, especialmente aquellas ligadas a los “narcomensajes”, que los mafiosos tienen por pieza clave de su estrategia de propaganda e intimidación. Es muy larga ya la lista de ciudades donde esto ocurre, lo que supone que en ellas triunfa la autocensura y el periodismo languidece.

Amarga tarea tendrá quien decida juzgar a unos o a otros, sea que se trate de una televisora nacional o una modesta publicación local. Pero bien hará el conjunto de la sociedad si toma nota de los peligros que esta situación impone para los cimientos de una democracia y la estabilidad de toda institución. El buen periodismo ejerce una tutela insustituible del derecho ciudadano a saber lo que ocurre en la esfera pública, lo cual representa el nutriente básico de su libertad de expresión.

En las últimas horas han surgido voces y letras lúcidas, como las externadas este fin de semana por Miguel Ángel Granados Chapa y Carlos Puig. Ambos aludieron a esquemas de solidaridad gremial en otros países y deploraron que el periodismo mexicano esté “infectado” de una competencia mal entendida, con un “ánimo inquinoso” (Granados) por el que cada medio viene “actuando y decidiendo solo” (Puig).

Nada permite suponer, antes al contrario, que el tipo de incidentes sufrido por periodistas de Milenio y Televisa será un acto aislado y único, antes al contrario, desafortunadamente. Es urgente por ello una interlocución eficaz y profesional, que privilegie los retos comunes, dejando de lado la larga lista de mezquindades que parece dominar al gremio y la industria periodística y que, por cierto, explica en buena media el rezago empresarial y político que en México caracteriza a la prensa respecto de otros medios.

Canales ágiles de comunicación y una atmósfera mínima de solidaridad de frente a los violentos y a la incapacidad gubernamental contra la impunidad, pueden empezar a sentar las bases de un nuevo paradigma en las relaciones entre los periodistas mexicanos.

Ese nuevo paradigma debe generar posicionamientos comunes y criterios compartidos, sin afectar la soberanía que cada medio tiene para darse sus propias políticas editoriales, y especialmente la libertad que debe ejercer frente a todo tipo de poder, especialmente el poder público, porque sólo así podrá desempeñar la tarea que la sociedad, con su confianza, le ha encomendado.

lunes, 26 de julio de 2010

Puebla: Claves y claroscuros

La derrota del PRI sorprendió dentro y fuera del gobierno de Mario Marín, pero se desconoce la tramoya de este fracaso, el más doloroso para el tricolor.

En las horas previas al 4 de julio, día de elecciones en Puebla, ocurrió un prodigio: por órdenes de una sola persona con el suficiente poder, o por la suma de múltiples voluntades, la maquinaria electoral del PRI fue desmontada en toda la entidad, uno de los estados considerados granero de votos del Institucional.

En paralelo, un ejército –calculado entre 5 mil y 8 mil personas- de operadores del sindicato de maestros, enviado por órdenes de Elba Esther Gordillo y coordinado por uno de sus estrategas electorales, el poblano Guillermo Aréchiga, se desplegó en el estado para garantizar que se consumara la ventaja que encuestas con alto nivel de precisión otorgaban ya al candidato opositor, el ex priísta Rafael Moreno Valle.

El mediodía de ese domingo de urnas, el gobernador Mario Marín recibió reportes de que Eduardo Rivera Pérez, un panista de ultraderecha, duplicaba los votos de Mario Montero Serrano, uno de los “juniors” de su grupo político –que incluye a su hijo, Mario Marín García. Al final de la jornada, la alianza de Acción Nacional con la izquierda vería casi triplicar la votación lograda en la capital poblana tres años antes, mientras que a nivel estatal casi duplicaba.

Puebla amaneció al día siguiente no sólo con un futuro gobernador proveniente de una alianza opositora, el cual aportó un impulso esencial para que su coalición triunfara también en más de la mitad de los 217 municipios –entre ellos, algunas de las ciudades más importantes- y conquistara asimismo la mayoría del Congreso estatal.

Sin duda, Moreno Valle protagonizó una exitosa campaña. Pero acaso tuvo una pequeña ayuda de sus amigos. Una versión recabada en fuentes creíbles establece que en vísperas de los comicios, personeros del gobierno Calderón ofrecieron a Marín un pacto de impunidad si se comprometía a no violentar el proceso. Otro acercamiento apunta en el sentido de que grupos de priístas, como los de los ex gobernadores Melquiades Morales, Guillermo Jiménez Morales y muchos líderes regionales, desplazados todos durante el gobierno de Marín, tomaron revancha y decidieron jugarla con Moreno Valle.

Esta última hipótesis tiene asidero en el hecho de que en al menos cinco distritos electorales del estado, el aspirante priísta a diputado local obtuvo más votos que el abanderado tricolor a la gubernatura, Javier López Zavala, el cual era motivo de discreta mofa por parte de colaboradores del propio Marín, quienes le llamaban “el negrito chiapaneco”, pues efectivamente es originario de Pijijiapan, Chiapas, si bien eventualmente obtuvo del Congreso estatal su ciudadanía poblana.

A causa de una reforma malhecha o maliciosa en la legislación que norma los tiempos políticos poblanos, el ahora gobernador electo Moreno Valle habrá de esperar casi siete meses, hasta el primer día de febrero, para habitar Casa Puebla, residencia de los gobernadores.

Moreno Valle ha iniciado un periplo de reuniones con personajes públicos, lo que incluye desde luego el encuentro con el presidente Calderón, varios secretarios de Estado y uno de sus aliados menos públicos, el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard.

Quizá para medir la temperatura de las cosas, y ya con la constancia de mayoría bajo el brazo, Moreno Valle se presentó en días pasados, sin cita ni previo aviso, precisamente en Casa Puebla, solicitando hablar con el gobernador Marín, lo que unos tomarán como un gesto noble y otros, un acto de arrogancia. Ahí esperó casi 30 minutos, hasta que le informaron que el saliente mandatario priísta no lo recibiría.

No serán los únicos inconvenientes con que se tope Moreno Valle. El colocó en varias candidaturas, bajo la cuota del PAN, del PRD y aun de Convergencia, a varios de sus incondicionales, de origen priísta. Pero sufrirá sobresaltos si intenta que su gobierno adopte ese solo perfil. Desde la alcaldía de la Angelópolis -donde él imaginaba a Enrique Doger, ex edil tricolor- y desde el Congreso –por no hablar de las dirigencias nacionales de PAN y PRD-, tendrá encima a muchos pares de ojos, muchas reivindicaciones por atender y en suma, un contrapeso real para la primera gubernatura de oposición, así sea formal, en la historia moderna de Puebla.